Sua culpa
"Los promotores reconocen que se ha construido el doble de las viviendas necesarias", dicen ahora.
Eso ya lo sabía cualquiera con dos dedos de frente.
Ahora toca preguntarse, y con no poca inquietud, ¿a costa de qué?
Y también toca planteárselo: ¿qué no exigirán a partir de ahora con su habitual práctica en el ejercicio de la rapiña?
0 comentarios