Pruebas

"Puede haber menores que sí lo consientan -referiéndose a los abusos- y, de hecho, los hay. Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan", manifiesta el Obispo de Tenerife.

 No seré yo quien dé un chavo por ese ridículo lugar común de la inocencia infantil o pseudoadolescente, y mucho menos en estos tiempos en los que, muy consciente de sus derechos y prebendas al tiempo que ávido de satisfacer sus caprichos, un simple niño se convierte con facilidad en bomba de relojería para todos quienes lo rodean.

 Sin embargo, Sr. Obispo, se supone que ustedes constituyen referencia moral, y que saben mucho de renuncias, penitencias y luchas victoriosas contra la carne y el pecado, ¿o en realidad no es para tanto?