Esto es de traca

Me gustan los coches, conduzco por necesidad y también disfruto haciéndolo por placer, luego soy corresponsable del exceso de emisiones de CO2 a la atmósfera. 

Pero en este mundo de los pretextos y lavados de cara, las buenas intenciones, la corrección política, la cirugía estética y el perpetuo buen rollito me ha dejado de piedra la iniciativa de Honda para esta temporada de Fórmula 1. Resulta que van a decorar sus coches en competición con una imagen del amenazado planeta en el que algunos viven y muchísimos más malviven, lo cual no casa muy bien con la bonita cifra de emisiones que producirá cada coche a lo largo de la temporada.

Bueno, dicen que todo es para que cobremos conciencia y bla, bla, bla.