Blogia
Ucronías

¡Al que no le guste el vino es un animal, es un animal!

 Como muestra de lo tornadizas que se vuelven las voluntades cuando se pasa de ejercer el poder a no tenerlo, ahora el Sr. Aznar se vuelve un paladín (irresponsable) de lo que él entiende como libertad personal bajo forma de "no me gusta que me ordenen", "no me gusta que me digan" , cuando en otros tiempo y contexto ejercía con gran placer el ordeno y mando.

 La anécdota es chusca, como el propio personaje en varias de sus facetas, y además resulta gratuita y poco propicia, una gracieta de alguien con escasa gracia.

 Tampoco creo, como parecen sostener la campañas de la DGT, que los conductores sean irresponsables por definición o asesinos en potencia, pero lo queramos o no estamos sujetos a normas en la carretera y no hay otro remedio que acatarlas, máxime las que se refieren a conducir bajo los efectos del alcohol, por leves que sean.

0 comentarios